jueves, 27 de agosto de 2015

Hacia donde mis labios se deslizaron
buscando el sabor deseado.
Por donde mis manos bajaron para hallarse infinitas de ti.
Es donde  
mi sexo amo a tu sexo con propia vida.
Allí donde pongo mis mejillas.
Allí, en la encrucijada perfecta tus muslos.
Donde mis dedos tocan la suave sensación tactil de tus  rodillas.

Allí donde mi hijo verá la luz de su primer día.
En ese lugar bendito que es prolongación 
de mi cuerpo etéreo.
En ese lugar de infinitos te quieros.
Es donde me conmuevo, me estremezco 
y te deseo.
.

Nace así la flor de mi amor
Sin pensarlo siquiera.
Brota como flama hirviente.
Como nieve blanca y serena.
Asi es mi amor hacia tí...
No pretende aprisionarte en mis razones. 
No comulga con egoísmos ni propiedad.
Solo se nutre de tus gestos y de tu andar. 
De lo buena que eres.
Y queda en espera hasta volver a verte.
Domina cada uno de mis segundos, 
mostrando tu rostro de pincel angelical, cada momento.
Así, así es mi amor...
Tonto si así quieres llamarlo.
Irreal también sería lo justo calificarlo. 
Pero aún así me revive de donde estoy, 
perdido y en la soledad más extrema.

Tomé ese vino que venía de tu boca suplicante.  
Ese que dice tus secretos, 
tus lugares, tus alegrías, tus ausencias.
Aquel que me suaviza y me deja melancólico, 
y me miente cada día. Y me dice secretamente tus afectos, 
los fermenta y los guarda en el tonel de tu inocencia.
Aquel con cuerpo de mujer, con mente de mujer y con sabor a vendimia.

Tomo  su aroma , su sabor y tus mentiras piadosas.
Bebo en él,  las memorias y los espíritus  que pasan a mi lado, 
que se condensan con la brisa, 
y como yo me deleito, en esta tarde ni fría ni triste 
con su sabor, con tu sabor, con tu risa.
Tomo este vino, 
el mismo que rozaron  tus labios, 
y  cual rocío de vida te encantaron. 
Lo tomo en un triste desliz.
Tomo este vino que venía de tus manos, 
cual ofrenda de paz, cual ofrenda de amor, 
cual beso de flor de lis.

Tomo en este vino mi destino
de tenerte siempre cerca, y solo
amarte en silencio.

miércoles, 19 de agosto de 2015

Hijita de mis alegrías.
Tierna y puro amor desde tu infancia.
Madura y radiante  como un sol,
bella como un botón de rosa a penas nacido,
Como una gota de rocío, siempre alimentándonos de tibieza.
Sin embargo en el transcurrir de la vida creo yo
te consideré autosuficiente...

Recuerdo tus llamadas de atención
a nuestras conciencias a pesar de tus cortos años.
Recuerdo tus proezas de inteligencia, tu inicio de tu lenguaje,
tan exacto y elevado para tu edad.
Tus bromas y sarcasmos actuales, tus humor fino y sutil.
Tus lagrimas prontas ante cualquier adversidad...

Recuerdo tus abrazos a la distancia...

Hoy y más que nunca, a pesar que se pasaron los años,
Siento la necesidad de pedirte un perdón
Por mis faltas de padre, mis ausencias, en tu primera infancia.
Por mi negligente creencia de tu autosuficiencia.
Por eso, hoy, y desde tu pubertad soy más amor.
Intento ser más cercano, más padre, más amigo...
Por eso mi niña que la realidad de los días no absorba, no te cambien.
Nunca declines ante la existencia del amor, de la familia,
de Dios, y de la solidaridad de los unos con los otros.
Hoy que cumples tus quince años...
Créeme que la única verdad que encontré con los años
y que te dejo es que nunca te olvides que naciste por que así lo quisimos.
Y que nunca pierdas la perspectiva del Amor en toda su dimensión.
Lo que son tus orígenes y tu flamante futuro deberá siempre estar regido
por tan vital sentimiento, ablandando tu corazón cada mañana,
cada despertar, cada recuerdo cuando él que está, ya no estará...
Mujer,
Mujer completa.
Tan amante.
Tan perfecta.
Mujer,
soñadora, espitual,
diosa selecta.
Como agradecer tu cariño.
Como medir lo inconmesurable.
Ese amor que me das como a un niño.
A veces madre, a veces niña.
Como no encontrarte en las estrellas,
dueña de mi amor.
Ante un la inminente despedida.

Que no se alejen tus labios de mis besos,
tu cuerpo de mis caricias sentidas y buscadas.
Que no se vayan las palabras de amor sin ser dichas.
Que no se vaya nuestra dicha
que puede prosperar con tus caricias, con mis afectos.
Que no permanezca la duda que nos ensombrece en angustias.
Que no queden recuerdos nada más,
por que hoy manejamos el presente.
Que no influyan los que no aman y no creen en el amor.
Que no muera la pasión que acompaña al amor.
Que no muera el amor que alimenta a la pasión.

Que no nos envuelva el orgullo,
el egoismo, y la depresión,
que se nos devuelva
esta dicha que creímos perdida.
Que no desvanezca el corazón
ante un futuro mediato de dicha.
Siento mis brazos tan intensos de amor,
tan calmados a mis dedos en tu cuerpo.
Siento a mis labios temblar sin tu calor.
Al espejo de tus ojos sin mi aspecto.
Siento tu pelo en mis mejillas,
Mis mejillas incandecentes en tu pelo.
Siento mis deseos en tu aliento.
Tu cuerpo en mi cuerpo.
Siento mis pasiones en ti iniciar.
Mis caricias en ti terminar junto
al ángulo de tus besos.
Suento mis ideas de tí hoy brotar.
Como si fueran de tí, mis propios sueños.
En una cama enamorada
estoy durmiendo hoy.
Ella me recuerda y
le dice a mi almohada lo infeliz que soy.
En mi  lejano y oscuro cuarto,
reposó un día tu amor.
No sé si fue un sueño...
No se si fue verdad...
Solo se que  lo que pasó,
jamás te apasionó.

En una cama ilusionada
escribo una oración.
Que ella  despierte enamorada
y reviva la llama de mi amor.

En esta pequeña pieza,
extraño yo su voz.
Extraño aún su figura cuando
me entregaba amor..
Extraño sus caricias
que se perdían en mi cuerpo
y auscultaban mi misma alma.
Extraño yo sus sonrisas
que despertaban  mis sueños al alba
Estoy buscando un lugar
en este mundo tan  extenso,
donde tus abrazos no te permitan alcanzarme,
ni tus caricias ni siquiera tocarme.
Un lugar donde tu existencia
no me signifique ni me perturbe.
Donde  esta realidad ausente de ti
no sea más que delusiones.
Donde no me importes
y sea inmune tus encantos y a tus problemas.
Estoy buscando un lugar en  el mundo,
donde pueda yo mí mismo sanarme
de la magia de tus encantos.
De la fatalidad que me persigue
deseando amores  imposibles ya por años.
Se hoy mi fuerza y no mi debilidad.
 Mi convicción y  no mi irrealidad.
Se mi pasión y no mi prisión, ni mi adicción.
Pequeña caricia es tu nombre.
Tiernos cariños son sus letras.
Sensual es su esencia.
Perfecta es tu intuición.
Audaz tu pensamiento
Maternal a veces tu amor.

Ternura en tiempos agrestes así es tu oración.

martes, 11 de agosto de 2015

Desde México .

Esposa mía…
Estoy esperando que el tiempo me diga que dos años pasaron  y estoy de vuelta.
Envuelto tan solo de recuerdos de mi celda.
Y de noches en soledad completa.  
Estoy esperando que el tiempo
 se acuerde de mi súplica cotidiana de volver a la vida.
Que detenga mi organismo, en piel y en canas.
Para no desperdiciar mis años tuyos.
En monótonos minutos y en horas mundanas.  
Sin embargo tu espejo ¿qué me miras?
Cotidiano es tu reflejo que me indica que robé dos años de mi vida,
a ustedes, familia mía.  
Amada mía…
Te cuento que conocí una parte de la vida,
en que el tiempo lentamente esta que gira y cómo el organismo cual animal responde.
A este experimento cruel.
A este claustrum eterno. A este hambre cotidiana. Esperando la limosna enviada.
Para saciar mí sed, mi hambre, y para aumentar mis culpas,
de deber y deber, además a las otras que me niego aceptar.          
Que venga ya la mañana de luz y paz,
de comodidad precisa, de amor y de hogar.  
De besos de esposa enamorada.
De caricias de mis hijos y de la amada.
De un olor muy familiar a tierra peruana…  
Esposa mía, amada mía.
Amor puro amor, aun en la distancia,
en la melancolía.  
Tesoro mío y solo mío,
aun siento a mil kilómetros tus palabras de amor en mis oídos.  
Cuantas caricias me esperan
luego que mi amor llegue a tu puerto húmedo y tibio deseoso de mi.
Cuantas horas de dicha inmensa, cuantos abrazos, cuantos besos.
Cuanto tiempo invertiremos.
Para amarnos, más que nunca.
Más que siempre.  
Es un día cualquiera hoy de mayo.
Es un día de espera del pronto existir.  
Te amo amada mía.
Por tu apoyo a mi causa, a nuestra causa.
Por creer en mí con mis defectos y mis errores.  
Te amo esposa mía.
Por tu amor, tu calor, tu confianza, tu pasión.  
Extraño tus besos, tus labios.
El tocar tus dientes blancos con mi alma traviesa.
Tu cuerpo de exquisito de tibieza.
Los gritos de los niños ahí a fuera…  
Extraño todo lo que signifique peruanidad.
Nuestra casa, nuestro lecho, nuestro hogar.

sábado, 8 de agosto de 2015

Aquí la ventana adquiere un color
de  noche oscura e interminable.
Aquí, mi dolor se consume y se comparte
Con el eterno frío del invierno.
Llorando está el cielo por que te fuiste.
Otra noche de insulto , mi pesadilla de siempre
me acompaña, mi alma se niega a morir.
Y mis dueños despiertos se quedan.
Otra gris velada y tu no estás ...
La ventana esta abierta...
Tú no vendrás.
Solo Un suspiro,  me acompañara.
Noche de insomnio , interminable eterna.
¿ Volverá ? .....

viernes, 7 de agosto de 2015

Oye paloma estas palabras,
aunque no escuches, quédate aquí.
Pues hoy no tengo ningún consuelo.
Porque a mi amada hoy la perdí.
Solo fue  ella,  la más querida
Y por  mi orgullo,  ya no es mía.
Ella era,  toda mi vida...
! Hoy ya no es mía, he de sufrir !

Besaba , frágil .
Tierna muñeca, acariciaba con tanto amor.
Con su sonrisa de linda niña.
Me hacia ver todo mejor.

Sus quince abriles la piropeaban
Cada mañana ella era un sol.
Iluminaba todos mis sueños.
¡ Hoy que ya no es mía,  que solo estoy!

Oye, blanca paloma.
Ella me quiso, ella me quiere.
Con tristes frases me extrañará.
Paloma anda, vuela hacia ella.
Cruza los aires mi mensajera.

Tal vez te diga, quizá te cuente.
Como me quizo , como me quiere.

Entonces vuelve mi mensajera.
Por que el destino te trajo a mí.
Tráeme el mensaje, tráeme a ella.
Búscame en el río, o en las lomas.
Amando espero vuestra presencia.
Hoy ya es mía , he de vivir.