Que poder tienen tus ojos,
que desvian mis miradas y me dejan,
en la vaguedad de lo incomprensible.
Que poder tienen tus labios,
que su sabor a durazno maduro imagino.
De perfecto bouquet, que el rozar  los míos desearían.
Que poder tiene tu mente para transportarme
a universos realativos,
a mundos paralelos de ficción,
y de emociones perfectas .
Donde mis mentiras se santifican,
mis deseos se convierten en realidades tuyas y mías.
Donde los héroes son los que luchan,
no los que sacrifican sus anhelos, y sus vidas..
Que poder tiene tu corazón.
Tan esquisitamente, tierno y profundo.
Y tan cerebral al renunciar.
Que aun no lo comprendo. No lo entiendo.
Que me mueve,  y me conmueve.
Y al  cual yo le agradezco su latir, aún distante del mío.
Que poder tienen tus manos.
Cálidas como un abrazo al solo tocarme.
 Frías y quietas al despedirme y olvidarme.
Que poder tiene tu moral, que diluye todo indicio de amor.
Que no deja  resquicio ni a una infantil fantasía.
 Fiel a tus preceptos  y  a  tu esencia.
Que poder tienen tus creencias,
que me dejan sin opciones,
insensible a mi amor, a mis dolencias.
Condenado a la incomprensible indiferencia.

Que poder  me ha robado mi voluntad, mi alegría, mi existir.